Mohamed Bourouissa en el jardín de las TulleríasMohamed Bourouissa en el jardín de las Tullerías

El jardín de las Tullerías fue creado en 1564 por Catalina de Médici, viuda del rey Enrique II. Sus puertas se abrieron al público en el siglo 17 y, en la actualidad, recibe a 14 millones de visitantes al año. Administrado desde 2005 por el Museo del Louvre, es un lugar declarado Monumento Histórico y Patrimonio Mundial de la UNESCO. El jardín de las Tullerías cuenta con dos sellos de calidad: el de «Jardin remarquable» (destacado), obtenido en 2019, y el de «Écojardin», concedido en 2025.

Su mantenimiento corre a cargo de un equipo de quince jardineros del patrimonio y quince empleados de recepción y seguridad. Los jardineros del patrimonio se contratan por sus competencias específicas en el cuidado de jardines históricos. Poseen múltiples destrezas que van desde cuidar naranjos hasta crear formas decorativas, lo que se conoce como topiaria. Su creatividad artística se manifiesta a través de las composiciones florales que se realizan en verano y primavera, en correlación con las exposiciones temporales celebradas en el Museo del Louvre. Su labor también conlleva arreglar ciertas partes del jardín, como los bosquetes y los parterres, y tareas tan sorprendentes como la fabricación de casas para pájaros.

El proyecto a largo plazo de Mohamed Bourouissa es algo que los jardineros han apreciado mucho, pues para entender la complejidad que se esconde tras este jardín, se necesita al menos pasar un año observando la vida que hay en él. Con el tiempo, el artista y los jardineros han acabado tejiendo lazos, basados en la comprensión y la curiosidad mutuas. Cabe destacar dos momentos importantes a lo largo de esta experiencia. El debate propuesto en presencia del público el 6 de abril de 2024, en el bosquet des Oiseaux (el bosquete de los pájaros), donde los jardineros llevan a cabo experimentos innovadores desde 2012. Y la visita del estudio del artista el 9 de diciembre, por iniciativa generosa de este. 

«Mohamed es alguien muy humano; aprecié mucho su presencia.»

Lionel, jardinero del patrimonio

 «La visita del estudio me ha impresionado: me he dado cuenta de que es un artista que toca a todo, no es una persona cualquiera que hace fotos con su teléfono en el jardín...»

Lahcene, jardinero del patrimonio